Los espacios abarrotados, oscuros, desordenados y con poca ventilación pueden provocar situaciones de bloqueo, falta de concentración y ansiedad entre otros. Además, los colores, los tejidos y los olores pueden influir en tu estado de ánimo.
Sin embargo, una estancia luminosa y ordenada, favorece a nuestra mente haciéndola más receptiva, aportándonos mayor productividad y bienestar mejorando así nuestro estado de de ánimo.
Añadir plantas a nuestra decoración nos acerca al mundo natural, aporta paz, alegra los espacios y nos llena de vida.
Cuando tenemos el espacio plagado de cosas que no aportan nada o no damos uso, nuestra mente se bloquea y nos impide avanzar. Por eso, en ocasiones, es conveniente hacer cambios en casa o en tu lugar de trabajo, y ya que estamos, deshacernos de las cosas que tenemos simplemente por apego. Ya verás lo beneficioso que es para tu estado de ánimo.
Es posible que no sea necesario hacer grandes inversiones en cambios de decoración y mobiliario, a veces, tan sólo reorganizando lo que ya tenemos es suficiente para definir nuestro estilo, conseguir la armonía que estábamos buscando y sentirnos bien en nuestro espacio.